En la escuela tenía muchas amigas y amigos, estaba involucrado en el trabajo en el teatro amateur de la escuela, pero eso no era lo decisivo. En ese momento, lo decisivo para mí parecía ser, ante todo, la pasión por la literatura, en particular por la literatura dramática y el teatro.
Juan Pablo II
El edificio construido en 1935 justo al lado de la rectoría rápidamente se convirtió en un nuevo centro de vida cultural en Wadowice. La entrada principal a la Casa Católica estaba en el lado de la calle Ogrodowa (hoy calle E. y K. Wojtyła), mientras que desde el lado de la iglesia se accedía directamente a un gran salón de teatro con asientos para 324 personas. Junto a él se encontraban el vestuario y el guardarropa. Tanto los anfitriones como la creciente comunidad artística local aprovechaban las posibilidades escénicas del nuevo edificio.
A partir de 1936, se representaron obras de teatro aquí bajo la dirección del profesor de la escuela secundaria, el Padre Edward Zacher. La escena en la rectoría se caracterizaba por un repertorio ambicioso que atraía a los amantes del teatro locales. Eran principalmente obras de temática religiosa. En el año escolar 1935/36, se organizaron eventos como una mañana en honor a San Stanisław Kostka, o una academia en honor a la Virgen María.
En 1936, Karol Wojtyła hizo su debut en este escenario como co-director de la obra "Nie-Boska Komedia" ("La Comedia No Divina"), en la que interpretó uno de los papeles principales, el Conde Henryk. En 1937, bajo la dirección del vicario y catequista de Wadowice, el Padre Władysław Świżek, los jóvenes presentaron varias veces el Misterio de la Pasión del Señor, que fue muy bien recibido en la ciudad.
En ese momento, en Wadowice, había varias compañías teatrales y sus directores colaboraban entre sí. Durante la organización de la obra "Apocalipsis de San Juan", en la que Karol Wojtyła interpretó el papel de San Juan, el Padre E. Zacher tomó prestados algunos accesorios del padre carmelita Bogusław Woźnicki. Envió a Lolek para que llevara al escenario una silla magnífica utilizada en ocasiones especiales por el celebrante en la iglesia del monasterio. La mala suerte hizo que el entonces prior de los Carmelitas Descalzos, el Padre Gabriel Klimowski, notara a Karol llevando la silla en la cabeza. Pensando que era testigo de un robo de un objeto valioso, corrió detrás del presunto ladrón gritando: "¡Ladrón, ¿de dónde lo sacaste?!..." Afortunadamente, la situación desagradable pronto se aclaró y el espectáculo tuvo lugar. La última obra en la Casa Católica en la que participó el joven Wojtyła antes de irse de Wadowice fue "Judas Iscariote" de K.H. Rostworowski.
Actualmente, la sala teatral se utiliza en el Museo Casa Familiar de Juan Pablo II como sala de conferencias, cine y exposiciones.
